¿Qué derechos tienen las niñas, niños y adolescentes en relación al trabajo?

De acuerdo con la Convención de los Derechos del Niño, niñas, niños y adolescentes tienen derecho a estar protegidas contra la explotación económica, así como contra el desempeño de cualquier trabajo que pueda ser peligroso o entorpecer su educación, o que sea nocivo para su salud o para su desarrollo físico, mental, espiritual, moral o social, (CDN, Art. 32). 

En la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes también se especifica que las autoridades deben prevenir, atender y sancionar los casos en que la infancia y la adolescencia se vean afectadas por el trabajo antes de los 15 años, así como el trabajo que pueda perjudicar su salud, su educación o impedir su desarrollo físico o mental, al igual que la explotación laboral, las peores formas de trabajo infantil, así como el trabajo forzoso (LGDNNA, Art. 47).

Sin embargo, como hemos visto en nuestro post anterior, 2.3 millones de niñas, niños y adolescentes en México realizaban una actividad laboral en 2022, y nueve de cada 10 personas de 5 a 17 años de estas personas lo hacían en una ocupación no permitida (sobre todo porque el tipo de trabajo era peligroso, aunque también por estar bajo la edad mínima). Estas actividades se podrían estar realizando por algunas de las causas que analizamos en otro post. ¿Pero en qué condiciones se realizaban esas actividades?

¿En qué trabajan las niñas, niños y adolescentes que laboran en ocupaciones no permitidas en México?

De acuerdo con los datos de la Encuesta Nacional de Trabajo Infantil (ENTI) 2022 publicados por INEGI, las niñas, niños y adolescentes que laboraban en ocupaciones no permitidas en el país durante 2022 lo hacían principalmente apoyando en actividades agropecuarias, así como en la industria y la construcción. 

Más de la mitad de las personas de 5 a 17 años ocupadas en ocupaciones no permitidas realizaban estas actividades; una de cada tres actividades agropecuarias y una de cada cuatro minería, construcción o industria.

Algunas de estas actividades se podrían estar realizando en condiciones prohibidas por la Ley Federal del Trabajo. En esta ley se prohíbe la participación de niñas, niños y adolescentes en labores “Agrícolas, forestales, de aserrado, silvícolas, de caza y pesca, que impliquen el uso de químicos, manejo de maquinaria, vehículos pesados […]” (LFT, Art. 176). En la misma ley se prohíbe el trabajo de personas de hasta 17 años en obras de construcción y algunas industrias, como la minera (LFT, Art. 176).

Por otra parte, una de cada siete personas de 5 a 17 años que laboraban en ocupaciones no permitidas en México durante 2022 lo hacía como comerciante y agente de ventas, mientras que una de cada 20 lo hacía como persona vendedora ambulante. Respecto a esto último, en la ley antes citada se prohíben los trabajos ambulantes de niñas, niños y adolescentes, con la excepción de los que tengan la autorización expresa de la Inspección de Trabajo (LFT, Art. 176).

En adición, una de cada 19 niñas, niños y adolescentes que laboraban en ocupaciones no permitidas en México durante el mismo año se ocupaba en servicios personales y vigilancia y una de cada 20 en trabajos domésticos y de limpieza. Los trabajos de limpieza en algunos casos podrían estar exponiendo a personas de hasta 17 años a agentes químicos contaminantes, cosa que se prohíbe en la ley (LFT, Art. 176). Por otra parte, en la misma ley se prohíbe el trabajo del hogar de adolescentes de hasta 14 años (LFT, Art. 331 Bis).

De estas ocupaciones no permitidas, el número de niñas, niños y adolescentes en el país que laboraban en el sector agropecuario, la construcción y la industria y el comercio y las ventas incrementó entre 2019 y 2022, mientras que la cantidad de quienes se ocupaban en la venta ambulante disminuyó durante el mismo periodo.

Por otra parte, los porcentajes de ocupación no permitida de las mujeres de 5 a 17 años en México eran mayores a los de los hombres en las actividades de comerciante y agente de ventas, servicios personales y vigilancia, venta ambulante, así como trabajos domésticos y de limpieza. Por otro lado, se observaban porcentajes de ocupación no permitida más elevados entre los hombres de la misma edad en actividades como las agropecuarias, así como la industria y la construcción. 

También era evidente que, a nivel nacional, el porcentaje de la ocupación no permitida de la niñez y adolescencia en actividades agropecuarias y la venta ambulante disminuía con la edad, mientras que este mismo porcentaje se elevaba con la edad en la construcción y la industria, así como los trabajos en servicios personales y vigilancia y los trabajos domésticos.

En adición, las personas de 5 a 17 años que laboraban en ocupaciones no permitidas y no asistían a la escuela en México durante 2022 se ocupaban en mayor proporción en la construcción y la industria y las actividades agrícolas, mientras que quienes laboraban en ocupaciones no permitidas y asistían a la escuela se ocupaban en mayor proporción en el comercio y la ventas y la venta ambulante.

Por otro lado, entre la población de 5 a 17 años que laboraba en ocupaciones no permitidas en el país durante el mismo año, el porcentaje de ocupación en actividades agropecuarias que fue observado entre quienes recibían beca para estudiar u otro programa de gobierno era mayor al registrado entre quienes no recibían ninguna ayuda o apoyo.

Además, el porcentaje de las niñas, niños y adolescentes que realizaban ocupaciones no permitidas dentro de la rama agropecuaria era mayor en las zonas rurales que en las urbanas de México, mientras que este porcentaje era mayor en las zonas urbanas que en las rurales para las actividades de la construcción e industria, el comercio y las ventas, los servicios personales y de vigilancia, así como la venta ambulante. 

¿Cuántas niñas, niños y adolescentes en México trabajan en horarios prolongados?

Una quinta parte de la población de entre 5 y 17 años que laboraba en ocupaciones no permitidas en México durante 2022 lo hacía en horarios prolongados, que correspondían a más de 36 horas a la semana para la población de 5 a 15 años y más de 48 horas a la semana para aquella de 16 y 17 años (LFT, Arts. 177 y 178).

De hecho, entre 2019 y 2022, la cantidad de niñas, niños y adolescentes que laboraban en esta condición en el país incrementó por más de 180 mil personas, elevándose así la proporción de la niñez y la adolescencia que se ocupaba en horarios prolongados de una de cada ocho a una de cada cinco personas de 5 a 17 años que laboraban en ocupaciones no permitidas.

Por otra parte, el porcentaje de mujeres que laboraban en ocupaciones no permitidas durante horarios prolongados era ligeramente mayor al de los hombres. 

También se observaba que el porcentaje de las niñas, niños y adolescentes que laborando en ocupaciones no permitidas se ocupaban en horarios prolongados incrementaba con la edad. 

A esto se debe agregar que entre la población de 5 a 17 años que no asistía a la escuela se observaba un mayor porcentaje de ocupación no permitida en horarios prolongados que entre quienes asistían a la escuela.

Otro contraste que se observaba era que, entre la niñez y la adolescencia que laboraba en ocupaciones no permitidas, aquellas y aquellos que no recibían ningún apoyo o ayuda presentaban un mayor porcentaje de ocupación en horarios prolongados que quienes recibían una beca para estudiar u otro programa de gobierno.

Adicionalmente, no se observaba una diferencia significativa en el porcentaje de personas de 5 a 17 años que laboraban en una ocupación no permitida por horarios prolongados según su habitación en zonas rurales o urbanas.

¿Cuánto perciben por su trabajo las niñas, niños y adolescentes que laboran en una ocupación no permitida en México?

Casi la mitad de las niñas, niños y adolescentes que laboraban en ocupaciones no permitidas en México durante 2022 percibía hasta un salario mínimo como remuneración. Además, una tercera parte de las personas de 5 a 17 años ocupadas en una ocupación no permitida en el país no recibía un ingreso.

La proporción de niñas, niños y adolescentes en ocupaciones no permitidas que percibían más de uno y hasta dos salarios mínimos por su trabajo era de una de cada nueve personas de 5 a 17 años ocupadas en México. 

Únicamente una de cada 83 niñas, niños y adolescentes que se ocupaban en ocupaciones no permitidas en el país percibía más de dos salarios mínimos como remuneración, límite de salarios mínimos que es empleado por CONAPO para estimar el Índice de marginación 2020.

Entre 2019 y 2022, la cantidad de niñas, niños y adolescentes que laboraban en ocupaciones no permitidas y no recibían ingresos incrementó a nivel nacional, al igual que el número de quienes trabajaban en ocupaciones no permitidas y recibían hasta un salario mínimo. En el mismo periodo, la cantidad de quienes laboraban en ocupaciones no permitidas y percibían más de 1 y hasta 2 salarios mínimos disminuyó.

Por otra parte, la desagregación por sexo nos revelaba que el porcentaje de personas de 5 a 17 años que laboraban en ocupaciones no permitidas y recibían hasta 1 salario mínimo era mayor entre las mujeres, mientras que el porcentaje de quienes laboraban en ocupaciones no permitidas y recibían más de 1 y hasta 2 salarios mínimos era mayor entre los hombres.

Por su parte, la desagregación por edad nos permitía observar que el porcentaje de quienes no percibían ingresos y laboraban en ocupaciones no permitidas disminuía con la edad, mientras que los porcentajes de quienes recibían hasta un salario mínimo o más de 1 y hasta 2 salarios mínimos por la ocupación no permitida que realizaban aumentaban con la edad. 

En cuanto a la desagregación por asistencia escolar, se podía observar que entre la niñas, niños y adolescentes que asistían a la escuela y laboraban en una ocupación no permitida el porcentaje de quienes no recibían ingresos era mayor, al tiempo que entre quienes no asistían a la escuela y también laboraban en una ocupación no permitida, el porcentaje de quienes percibían algún ingreso, particularmente entre 1 y 2 salarios mínimos, era significativamente mayor.

En adición, la desagregación por tipo de apoyo recibido permitía percibir que entre quienes recibían beca escolar u otro programa de gobierno, el porcentaje de la niñez y adolescencia que realizaba una ocupación no permitida y no recibía ingreso era mayor al observado entre quienes no recibían ninguna ayuda o apoyo. 

Por el otro lado, entre quienes no recibían ninguna ayuda o apoyo, el porcentaje de quienes percibían algún salario por la ocupación no permitida que realizaban era mayor al de quienes recibían una beca escolar u otro apoyo, particularmente en la franja de hasta un salario mínimo, y más de 1 y hasta 2 salarios mínimos.

Adicionalmente, en las zonas rurales el porcentaje de quienes realizaban una ocupación no permitida sin percibir ingresos era mayor al registrado en zonas urbanas. Inversamente, en las zonas urbanas se observaron mayores porcentajes de niñas, niños y adolescentes ocupadas en ocupaciones no permitidas que percibían algún salario, particularmente hasta un salario mínimo y más de 1 hasta 2 salarios mínimos.

¿Cómo afecta el trabajo a los estudios de niñas, niños y adolescentes en México?

Dos de cada cinco de las niñas, niños y adolescentes que laboraban en ocupaciones no permitidas en México durante 2022 no asistían a la escuela. De esta población, casi la mitad debía su inasistencia escolar a la falta de interés, aptitud o requisitos para entrar a la escuela, mientras que una de cada cinco no podía cursar sus estudios por el trabajo que desempeñaba.

En adición, una de cada 11 de las niñas, niños y adolescentes que laboraban en ocupaciones no permitidas y no asistían a la escuela en México debían su inasistencia escolar a la falta de recursos económicos. Por otro lado, una de cada 24 personas de entre 5 y 17 años que laboraban en ocupaciones no permitidas y no asistían a la escuela se encontraba en esta condición por inseguridad, discriminación y la distancia de la escuela.

Además, una de cada 45 niñas, niños y adolescentes que laboraban en ocupaciones no permitidas y no asistían a la escuela en México no tenían acceso a la educación por embarazo, matrimonio o unión y motivos familiares; esta proporción era mayor entre las mujeres. Otro dato preocupante era que de la población de 5 a 17 años que laboraba y no asistía a la escuela en México, una de cada 59 niñas, niños y adolescentes no asistían a la escuela por enfermedad, accidente y/o discapacidad.

Por otra parte, el porcentaje de hombres que no estudiaban en México era ligeramente mayor al de las mujeres que se encontraban en la misma situación entre la población ocupada en ocupaciones no permitidas de 5 a 17 años del país. 

Otra observación era que, a nivel nacional, las mujeres de esta edad que trabajaban en ocupaciones no permitidas y no estudiaban no asistían a la escuela en proporciones mayores a los hombres por las siguientes causas: falta de recursos económicos; embarazo, matrimonio o unión y motivos familiares; y por realizar quehaceres domésticos.

Por otra parte, entre los hombres de 5 a 17 años que laboraban en ocupaciones no permitidas y no estudiaban, las razones por las que estos no asistían a la escuela se daban en mayores proporciones que entre las mujeres por: falta de interés, aptitud o requisitos para entrar a la escuela; y por trabajo.

En adición a esto, era notable que la inasistencia escolar de la niñez y adolescencia que laboraba en ocupaciones no permitidas en México aumentaba con la edad: mientras el 2.7% de la población de 5 a 9 años que laboraba en una ocupación no permitida no asistía a la escuela, este porcentaje se elevaba a 56.1% entre las y los adolescentes de 15 a 17 años que laboraban en una locución no permitida. 

Además, la proporción de niñas, niños y adolescentes que laboraban en ocupaciones no permitidas por trabajo aumentaba con la edad, mientras que quienes se encontraban en esta condición por falta de interés, aptitud o requisitos para entrar a la escuela disminuía con la edad.

¿Qué tipo de apoyos reciben las niñas, niños y adolescentes que trabajan?

Casi dos de cada tres de las personas de 5 a 17 años en el país no habían recibido ayuda de algún gobierno o familiar durante 2022. En adición, una de cada cuatro del total de las niñas, niños y adolescentes había recibido alguna beca para estudiar y una de cada 23 recibió apoyo de otro programa de gobierno.

En términos generales, esta misma tendencia se mantuvo en la población infantil y adolescente que laboraba en ocupaciones no permitidas a nivel nacional durante el mismo año, elevándose a tres de cada diez la proporción de quienes recibían una beca para estudiar y disminuyendo a una de cada 44 la proporción de quienes recibieron apoyo de otro programa de gobierno.

Esta proporción cambiaba notoriamente entre la población de 5 a 17 años que laboraba en una ocupación no permitida y no asistía a la escuela en el país: entre esta población, más de nueve de cada 10 niñas, niños y adolescentes no recibían ayuda de algún gobierno o familiar durante 2022, reduciéndose a una de cada 22 la cantidad de personas de 5 a 17 años que recibían una beca para estudiar.

De manera interesante, entre la niñez y la adolescencia que recibía una beca para estudiar en México durante 2022, el porcentaje de quienes se encontraban en condición de trabajo infantil era mayor al de quienes no habían recibido ninguna ayuda o apoyo de gobierno.

En adición, la cantidad de niñas, niños y adolescentes que vivían en situación de trabajo infantil y recibían una beca para estudiar en el país había aumentado entre 2019 y 2022, al igual que el número de personas de 5 a 17 años que vivían en situación de trabajo infantil y no recibieron ninguna ayuda o apoyo de gobierno. 

Resumen: Condiciones de trabajo de niñas, niños y adolescentes en México (2019-2022)

Más de la mitad de las personas de 5 a 17 años que laboraban en ocupaciones no permitidas en México durante 2022 realizaban actividades agropecuarias o de la industria y la construcción. En adición, una quinta parte de quienes trabajaban en ocupaciones no permitidas lo hacía en horarios prolongados, siendo esta proporción mayor entre las mujeres, las y los adolescentes, quienes no asistían a la escuela y quienes no recibían ninguna ayuda o apoyo.

Por otra parte, casi la mitad de quienes laboraban en ocupaciones no permitidas percibían hasta un salario mínimo a cambio, siendo de una de cada tres la proporción de quienes se encontraban en esta situación y no recibían remuneración. 

Además, dos de cada cinco niñas, niños y adolescentes que laboraban en ocupaciones no permitidas no asistían a la escuela. De hecho, entre la población de 5 a 17 años que laboraba en una ocupación no permitida y no asistía a la escuela en el país, más de nueve de cada 10 niñas, niños y adolescentes no recibían ayuda de algún gobierno o familiar durante 2022.

¿Dónde puedo encontrar más información sobre trabajo y niñez y adolescencia en México?

Estas son algunas de las entradas que hemos elaborado sobre ocupaciones de niñez y adolescencia, trabajo infantil y peores formas de trabajo infantil:

¿Qué se puede hacer para ayudar a reducir el trabajo infantil en México?

El trabajo infantil es un fenómeno complejo y con muchas aristas: por un lado, tres de cada 10 de las personas de 5 a 17 años que laboraban en ocupaciones no permitidas en 2022 lo hacían por gusto o solo por ayudar, mientras una de cada cinco niñas, niños y adolescentes ocupadas en estas condiciones lo hacía porque el hogar necesitaba de su trabajo o su aportación económica. 

Desde la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM) promovemos que niñas, niños y adolescentes puedan realizar actividades que ellas mismas escogen para ayudarles en su desarrollo o contribuir al hogar.

También realizamos acciones de incidencia política para impulsar que el estado Mexicano cumpla con su obligación de erradicar lo que la Organización Internacional del Trabajo (OIT) denomina trabajo infantil porque es una violación a los derechos de la infancia y adolescencia que entorpece su desarrollo y potencialmente produce daños físicos y psicológicos, así como las peores formas de trabajo, como la esclavitud, la trata de personas, la explotación sexual infantil y el trabajo forzoso. 

Para ello promovemos que el Estado mexicano adopte medidas como las siguientes:

  • Atender las causas estructurales (educación, pobreza, alimentación, salud, vivienda), las cuales posibilitan la existencia del trabajo infantil y adolescente.
  • No criminalizar el trabajo infantil y adolescente de familias en contextos de supervivencia.
  • Establecer una coordinación entre las distintas instituciones federales y estatales que elimine las peores formas de trabajo infantil y adolescente.
  • Aumentar el presupuesto, número y capacitación de inspectores laborales de la Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STPS) que supervisen y garanticen los derechos humanos de niñas, niños y adolescentes.
  • Que la STPS a nivel federal y estatal realice inspecciones laborales en sectores productivos formales e informales sin previo aviso.
  • Abrir espacios de colaboración a la sociedad civil que facilite el acompañamiento a las instituciones gubernamentales.

Si quieres apoyarnos promoviendo que el Estado mexicano tome medidas para erradicar el trabajo infantil y las peores formas de trabajo por favor visita nuestras redes sociales: facebook.com/derechosinfancia.org.mx.

¡Gracias!

Fuentes: INEGI, MTI 2007-17, ENTI 2019-2022.

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *