CODENI, la federación coordinadora de la niñez y adolescencia hasta 2022 era una red que trabajaba por los derechos de la niñez y la adolescencia en Nicaragua.” ¿Por qué hablaba en pasado Marvin García, defensor de los derechos de la niñez y adolescencia en Nicaragua, sobre la trayectoria de una organización de más de 30 años?

Después de la entrevista hice una investigación y así me enteré de que entre enero 19 y diciembre 9 de 2022, el gobierno nicaragüense había eliminado 3,108 Organizaciones No Gubernamentales (ONGs) en el país, o el equivalente a dos de cada cinco organizaciones de la sociedad civil en Nicaragua. 

Esta era solo una de las medidas cuestionables de un gobierno que, de acuerdo al Índice de Democracia 2021 de la Economist Intelligence Unit, había orquestado una “farsa” de elecciones en 2021 (“sham” election) y que expulsó a la embajadora de la Unión Europea solo algunos días después de que el bloque de 27 naciones exigiera la liberación de más de 200 personas opositoras presas.

Marvin y yo habíamos acordado previamente mantener nuestra conversación estrictamente en términos técnicos, sin embargo, era imposible para mí no pensar durante todo el intercambio qué había hecho esta organización de defensa y promoción de derechos para ser eliminada por un gobierno que el Índice de Democracia 2021 antes citado calificaba de “autoritario”.

“Una de las particularidades es que teníamos —tienen hasta el momento— un Observatorio de Derechos Humanos que se encarga de monitorear el estado y la situación de los derechos de la niñez y la adolescencia. Por ejemplo, la situación de las políticas sociales y al mismo tiempo la inversión pública”, continuó ahondando Marvin sin sospechar mi interrogante. 

Este Observatorio de los Derechos de la Niñez y la Adolescencia realizaba análisis y visualizaciones a través de la plataforma de Tableau* que después diseminaba con medios de comunicación, academia, actores clave y niñas, niños y adolescentes de maneras muy creativas: 

“Presentábamos las visualizaciones a los medios de comunicación, donde a partir de ahí te pedían abordar a un nivel más específico sobre un dato, sobre una cifra” precisaba Marvin. “Los niños y niñas [también] discutían a nivel de simposios o webinar el estado de sus derechos a partir de esa información que tenemos en nuestro portal web”. 

Después de preguntar a Marvin sobre el impacto de estas acciones, él resaltó su experiencia a nivel comunitario: “Hubo experiencias muy buenas en cuanto a los cabildos: los encuentros que tiene la población con las autoridades de gobierno municipal. Al darles estas herramientas permite que ellos participen activamente y demanden al Estado sus derechos.” 

La labor de Marvin no se limitaba a proveer los datos ya procesados en las visualizaciones; él también fortalecía capacidades de otras organizaciones para que ellas mismas abrieran sus datos: “Hay un convenio de colaboración con un observatorio de pueblos indígenas y afrodescendientes, el OdhaBicu. Hicimos asesoramiento y talleres de Tableau.”

Tras solicitarle un ejemplo de una buena práctica de visualización que deseara compartir con el grupo, Marvin no dudó en hacerme llegar esta muy reveladora infografía interactiva:

“El tema de la movilidad humana hoy en día ha cobrado mayor relevancia luego de la pandemia. […] El principio era identificar las fuentes de información, hacer una base de datos y tratar de hacer una visualización que fuera amigable, que tuviera la información precisa pero que no estuviera cargada de tantos datos de tal forma que el usuario tenga las opciones para que a partir del uso de los filtros haga su consulta respectiva; puede hacerlo por país, por edad, por sexo.”

En resumen, CODENI es una organización de la sociedad civil que defendía derechos, promovía la transparencia y rendición de cuentas del Estado e impulsaba a la participación de la niñez y la adolescencia. Su trabajo debería de ser protegido y respetado por el Estado y es muy lamentable que haya tenido que interrumpir sus labores tan valiosas.

Antes de cerrar, solicité a Marvin dos últimas recomendaciones para otras organizaciones que buscaran generar visualizaciones de impacto:

  • “Dos recomendaciones: Una de entrada es que tengan claridad absoluta, que hagan un bosquejo sobre lo que quieren proyectar.” 
  • “Y dos, que traten de hacer visualizaciones que no sean tan cargadas. Que tengan información pero que también tengan explicación en dos, tres líneas.”

* Aclaración: La realización de este post fue financiada por Tableau Foundation; el post está destinado a proveer de buenas prácticas a las y los participantes en un proyecto apoyado por esta fundación.

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